– Normalmente, es interesante mantener una gasa, presionándola sobre la zona tratada, al menos 30 minutos tras la intervención. Si en algún momento nota cierta hemorragia o sangrado, coloque de nuevo una gasa y muérdala durante media hora.
– No se debe enjuagar enérgicamente los primeros días, ya que ello podría llevar al desprendimiento de algún coágulo sanguíneo, provocando sangrado.